Hacienda ha iniciado una campaña de asedio contra el alquiler de viviendas vacacionales, alquileres irregulares y todas aquellas transacciones no declaradas entre particulares como medidas del Plan de control de 2015.
Las actividades y rentas ocultas constituyen una competencia desleal frente a las empresas inmobiliarias, hoteleras, etc que sí están cumpliendo con el fisco, pero sobre todo debilita las garantías del consumidor a la hora de reclamar.
Para ello, Hacienda va a rastrear toda la información sensible que en internet se publica en portales inmobiliarios directamente entre particulares.
Más de 200.000 dominios van a ser inspeccionados, en donde van a ser vigiladas tanto particulares como empresas. Cantabria no es una excepción y ya se están inspeccionado los anuncios de alquiler de temporada, cuyo máxima actividad se desarrolla en visperas de Semana Santa.