Los datos no mienten, se vende una tercera parte de lo que se compraba en 2006 y se construye apenas un 4% desde el momento más álgido. Hemos tocado fondo, pero aún estamos lejos de los años de bonanza. Como datos positivos, crece el empleo por encima del 3% y aumenta la financiación.
En Cantabria la tasa de paro tambien disminuye pero no en la misma proporción que la media española, El índice de poblaciónactiva disminuye a su vez y por lo tanto también lo hace la creación de hogares, pero tenemos en la balanza un bajo stock de viviendas y el crecimiento del turismo que se está convirtiendo en el motor principal de la economía cántabra y con él, la demanda de segundas residencias y explotación de viviendas vacacionales.
De cómo evolucionen esas dos variables, empleo- crédito va a depender que la recuperación se consolide o se estanque y es por lo que casi nadie se atreve a aventurar cuál será la necesidad de vivienda nueva a futuro.
Esta semana precisamente se reunía el Consejero de Obras Públicas y Vivienda del Gobierno de Cantabria, D. José María Mazón, el presidente de CEOE-CEPYME, D. Lorenzo Vidal de la Peña, con representantes de la Asociación de Constructores y Promotores de Cantabria e inmobiliarios a través de lo que se ha venido a llamar el Observatorio de la Vivienda y suelo de Cantabria, en donde a través de las cifras y cálculos de todos los expertos en vivienda se pueda planificar las políticas de vivienda y el desarrollo urbanístico.
El Sr. Mazón ha asegurado que éste 2015 ha sido el año de la estabilización del mercado y que lo precios por fin han tocado fondo.
Desde la Asociación de Inmobiliarias de Cantabria AFILIA compartimos los datos y el optimismo moderado, preveemos que pronto se empiece a construir, al menos en zonas donde se acaba el stock y la segunda mano y se ve prudente buscar la fórmula para simplificar la legislación urbanistica y la Gestión del suelo para poder adaptarse a los cambios y sacar al mercado suelo a bajo precio para mover la actividad económica según exija la demanda.