La pregunta de muchas familias, parejas y solteros es si ya es un buen momento para comprar vivienda. La razon nos dice que sí, pero el corazón, puede decirnos lo contrario. En el anterior post de AFILIA INMOBILIARIAS comentabamos las medidas temporales para reactivar el sector como la reducción temporal del IVA en vivienda nueva y otras rebajas en impuestos de la vivienda en Cantabria de la que se pueden beneficar muchas familias hasta el 31 de diciembre. Si sumamos que los precios de la vivienda en Cantabria han bajado ( y siguen bajando) el euribor se mantiene en niveles bajos y hay una gran oferta donde elegir: Obra nueva terminada, segunda mano, inmuebles de adjudicados,…. ¿por que entonces las agencias inmobiliarias no tienen largas colas de gente en sus oficinas y agolpada en los escaparates? Al contrario las subastas públicas de inmuebles embargados quedan desiertas y aunque las inmobiliarias de AFILIA siguen vendiendo, su ritmo está contraido.
Está es una pregunta que bien podría tratarse en el Blog de Eduardo Punset. Somos animales de costumbres y compramos cuando todos compran aunque sea cuando más cara está la vivienda y dejamos de hacerlo cuando lo demás lo hacen, aunque su precio sea el más bajo de la decáda. Como dice nuestro pensador Eduard Punset "En el principio y en el final de todos los proyectos humanos no encontraremos otra cosa que sentimientos".
Somos animales emocionales como bien recoge el editorial de Rafael Bueno, la vivienda "es nuestro respaldo económico y emocional" y va a depender mucho de los intereses personales y las respuestas que cada individuo sepa tomar a pesar de la tendencia.
"Resulta fundamental que seamos capaces de cambiar de opinión, que nos abramos a las posibilidades". Y entre esas posibilidades desde AFILIA Inmobiliarias animamos a las personas que quieran cambiar de vivienda, sueñen con su segunda residencia en la costa o quieran formar un hogar a que consulten sus posibilidades con el agente inmobiliario de su confianza. El es el único profesional que puede asesorarle a dar el paso o a esperar. Duc in altum ¡Aspire a lo bueno, a lo mejor!